Este es el clásico de los clásicos para los que ocupan lentes: estás súper bien cocinando, destapas la olla y ¡PAH! tus vidrios empañados ☹ 

¡Tranqui! Aquí te damos algunos trucos al estilo Bonanza:

1. ¡Cocina con la olla semitapada! O también puedes ir destapándola de a poquito, y así no saldrá todo el vapor de una en la cara.
2. Prende el mejor artefacto de una cocina: la campana. Sabemos que es ruidosa, pero te prometemos que el vapor se irá por ahí mucho más rápido.
3. Si no tienes campana, quizás tu cocina tiene una salvadora ventana y podrás tener una corriente de aire que seguro ayudará.
4. Y si eres ansioso, abre la tapa de una pero con el brazo estirado. ¿Cachai? Así tendrás distancia cuando salga el vapor.

Bueno y si no, los lentes de contacto también pueden ver una buena idea. Jeje.